Durante los procesos de fabricación de lubricantes, las empresas utilizan los más severos estándares de limpieza y control de calidad, asegurando que el producto que sale de sus plantas cumpla con las especificaciones adecuadas.

Es de fundamental importancia hacer una correcta manipulación y almacenamiento de aceites lubricantes para preservarlos. La contaminación de los lubricantes es uno de los modos de falla más comunes en la maquinaria.

La misma puede ocurrir durante el transporte, el almacenamiento, manipulación y aplicación en el equipo, a menos que se tomen algunos cuidados.

Cómo hacer el almacenamiento de aceites lubricantes

El primer paso es la selección de un espacio adecuado para el almacenamiento. Idealmente, los lubricantes deben ser almacenados bajo techo, a una temperatura relativamente constante y moderada.

Cómo hacer el almacenamiento de aceites lubricantes

Esta instalación debe cumplir los siguientes requisitos:

  • Acceso adecuado para los vehículos de suministro de lubricante.
  • Lugar suficiente para circulación de montacargas.
  • Control de inventarios.
  • Separación de áreas de lubricante nuevo y de lubricante usado para reciclar.
  • Organizar los envases por tipo de producto.
  • Rotación de stocks. Mantener el criterio de “Primeros Ingresos” – “Primeras Salidas”.
  • Elementos de seguridad adecuados.
  • No se recomienda acomodar drones en más de 3 niveles.

Almacenamiento interior

Es la mejor opción para el almacenamiento de aceites lubricantes. Las características principales son:

  • Pisos de cemento o material para disminuir el polvo.
  • Iluminación en todas las áreas a prueba de explosión.
  • Ventilación adecuada.
  • Control de temperatura y humedad.
  • Espacio suficiente para maniobras con los productos.
  • Extintores de Polvo Químico ABC.
  • Materiales de contención de fugas y derrames.
  • Evitar el almacenamiento junto a solventes y otros productos químicos.

Cómo manipular aceites lubricantes

Almacenamiento exterior

Se debe evitar el almacenamiento de aceites lubricantes a la intemperie, pues los riesgos de contaminación son mayores.

Cuando la temperatura baja, el producto se contrae y, como consecuencia, entra aire húmedo. Esta humedad del aire, provoca condensación. Y cuando la temperatura sube, este aire es expulsado porque el producto se dilata, quedando dentro el agua condensada. Para minimizar los efectos, se recomienda:

  • Evitar las altas y bajas temperaturas.
  • Colocar los envases de lubricantes sobre plataformas de madera o plástico.
  • Colocar diques de contención para derrames.
  • Almacenar las menores cantidades posibles para que el producto se encuentre expuesto el menor tiempo posible.

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